El filtro de carbón Falcon es el aliado perfecto para eliminar los olores no deseados del aire que circula desde tu zona de cultivo hacia el exterior. Gracias a su diseño eficiente y materiales de alta calidad, garantiza un ambiente más limpio, fresco y libre de aromas fuertes.
Funciona mediante un sistema de carbono activado que atrapa las partículas responsables del olor en su estructura porosa, dejando pasar únicamente aire purificado. Su funcionamiento es sencillo, pero su efectividad es reconocida por cultivadores de todo el mundo.
Para un rendimiento óptimo, es importante instalar el filtro correctamente: acoplado al extractor y alejado del intractor, de modo que todo el aire pase a través del filtro antes de ser expulsado.
Los filtros Falcon están rellenos con carbono activado Rc412 100% australiano, procedente de yacimientos profundos y activado con vapor de agua a altísimas temperaturas. Este tipo de carbón es conocido por su pureza, baja densidad y alto poder de absorción, convirtiéndolo en uno de los más eficaces del mercado.
Además, los filtros no contienen pegamentos ni aglutinantes, lo que permite aprovechar al máximo la capacidad del carbón y mejorar el flujo de aire. Su fabricación artesanal asegura que cada molécula de aire sea filtrada sin fugas.
Caudal máximo (m³/h)
1125, 1420, 1900, 2500, 2850, 300, 3250, 500, 900
Diámetro Boca (mm)
100, 125, 150, 200, 250, 315
Longitud (mm)
1000, 1100, 200, 300, 600, 800